Hoy la gente vive deprisa. Es así, para bien o para mal, y hay que asumirlo. Aunque se supone que las vacaciones son un momento de tranquilidad y relajación, a muchos (y me incluyo) nos gusta aprovechar hasta el último minuto: un fin de semana, una escala en un viaje en avión o en tren… cualquier momento es bueno, por corto que sea.
Como ya hemos dicho otras veces, París es de esas ciudades que nunca se acaban; puedes pasar en ella toda la vida descubriendo cosas nuevas. Puedes volver infinitas veces y nunca deja de sorprenderte. Visitarla demasiado es, sencillamente, imposible. Aunque sea un día.
Pero, ¿qué ver en París en un día?.
Mucha gente nos pregunta lo mismo porque, como hay bastante que ver en Disneyland Paris, sólo tienen 24 horas para conocer la Capital de la Luz, y se preguntan cómo hacerlo, si merece la pena y qué es lo que no deben perderse bajo ningún concepto. Pues atentos, que os lo contamos.
Si queremos saber qué ver en París en un día, hay que partir de la idea de que no se puede ver todo, y de que tendremos que dejar para otra vez algunas de las principales atracciones de la ciudad.
Estoy pensando, por ejemplo, en el Louvre: no tiene sentido verlo deprisa y corriendo. En todo caso, si no puedes resistirte, hay visitas guiadas de hora y media en inglés… Eso sí, hazte con la entrada online para evitar colas y agilizar el acceso.
Una opción que deberías plantearte es visitar solamente una de las zonas de París, para evitar perder mucho tiempo de acá para allá en transporte público. Te aseguro que, aunque no veas otras atracciones principales, disfrutarás mucho más de tu estancia.
Vamos a dar por supuesto que, aparte de tener un solo día, es tu primera vez en París. Los que se están preguntando qué ver en París gratis o con niños… ¡Claro que pensamos en vosotros! Así que vamos a centrarnos en una sola zona que no te puedes perder y es una delicia para todos los públicos: Montmartre.
El barrio bohemio por excelencia de la ciudad es una de las mejores cosas que ver en París en un día y tiene mucho, muchísimo que descubrir. Por supuesto, está el famosos Sacré Coeur y, a su sombra, la venerable iglesia de Saint Pierre, las escalinatas y el funicular…
Y también la animada calle Lepic, arteria central del barrio, en cuyo número 13 se rodó buena parte de la recordadísima Amélie, con sus vistas al histórico Moulin de la Galette, y que une la plaza Blanche (la del Moulin Rouge) con la Tertre, plagada de pintores y anécdotas curiosas.
Pero hay mucho más. Puedes acercarte a su espectacular cementerio (poco que envidiar tiene al Père Lachaise); ir al teatro en Les Abbesses; los más intelectuales y nostálgicos no pueden perderse el Bateau Lavoir (rue Ravignan), y los más multiculturales, dejar de pasearse por los cercanos vecindarios de Chateau Rouge y Barbès, donde la inmigración africana ha dejado huella.
Miles de empresas ofrecen recorridos panorámicos a pie o en autobús por la ciudad. Nosotros te sugerimos que, en lugar de adaptarte a sus rutas, hagas la propia ruta utilizando el transporte público de superficie. En este caso, ir desde Montmartre a nuestro próximo destino te llevará unos 30-45 minutos y te costará unos 2 euros.
Muchas veces nos obcecamos por acercarnos todo lo posible a nuestro objeto de atención, cuando en realidad lo mejor es, muchas veces, tomar cierta perspectiva. Para ello, qué mejor que una increíble vista panorámica de la ciudad. No, no vamos a subirnos a la Torre Eiffel (porque entonces no podrás ver la Torre Eiffel, ¿a que no?).
Vamos a irnos a la Torre Montparnasse (distrito XV, Av. du Maine 33; metro Montparnasse), el segundo rascacielos más alto de París (209 metros, 59 pisos), en pleno distrito de Montparnasse. Su terraza está abierta todo el año, de 9.30 a 22.30 (invierno) o 23.30 (verano). Las entradas (sin fecha) cuestan entre 8,50 y 23 euros, pero las vistas no tienen precio.
Aparte de poder disfrutar de todo el llamado “eje histórico” (Louvre, Plaza de la Concordia, Campos Elíseos) y la mejor vista de la Torre Eiffel, tienes la opción de darte un capricho de lujo en el restaurante gastronómico de la planta 56, entre otras opciones. Porqué elegir qué ver en París en un día si puedes verlo TODO.Y si eres de los que prefieres tener los pies en la tierra, el barrio de Montparnasse no te decepcionará. No me digas que no es una forma perfecta de terminar el día.
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