Hola. Somos Ana y Víctor del blog PERDERSE POR EL MUNDO y ya que vivimos en Londres, te vamos a contar nuestra experiencia en la capital británica en un viaje exprés de 48 horas que hicimos antes de instalarnos definitivamente.
Si solo tienes un fin de semana libre o si es una parada intermedia hacia tu destino, esperamos que este viaje te pueda servir en la preparación del tuyo.
Prepárate que nos vamos…
En estos dos días que íbamos a estar en Londres queríamos ver muchas cosas, por lo que teníamos que darnos prisa, por lo tanto, lo primero era levantarse temprano para aprovechar el día al máximo.
Comenzamos el día de hoy viendo –solo por fuera- el Palacio de Buckingham donde vimos el cambio de guardia y seguimos hasta la Abadía de Westminster, la cual tampoco visitamos, ya que ese día estaba solo abierta para servicios religiosos. Una pena, porque ahí sí que hubiésemos entrado a pesar de lo que cobraban por verla.
Pasamos por delante del Parlamento y del Big Ben, que en ese momento se veía en todo su esplendor, aunque ahora si vas, te lo encontrarás al “pobre” con andamios hasta el 2021 por reparación.
Cruzamos el puente de Westminster y enseguida ya estábamos al lado del London Eye, donde ahí sí que queríamos subir:
Disfrutamos de unas espectaculares vistas e hicimos un montón de fotos para el recuerdo.
Desde ahí, nos decidimos a coger un pequeño Crucero por el Támesis, en el cual podías subir y bajarte tanto como quisieras en 4 zonas: Muelle de Westminster, London Eye, Torre de Londres y Greenwich.
Para finalizar el día –que ya íbamos bien servidos- cruzamos el Puente de la Torre y nos fuimos a dormir para continuar al día siguiente con otra buena cantidad de cosas que ver.
El segundo día en Londres también iba a ser “movidito” así que de buena mañana ya estábamos en la calle.
Para comenzar el día, nos fuimos a Camden Town que como sabrás es uno de los barrios más famosos de Londres:
Aunque aún era temprano, no pudimos resistirnos a comer una buena arepa. ¡Estaba de rica…!
Después del “desayuno” nos fuimos al museo de cera más famoso del mundo (o eso dicen): Madame Tussauds:
Unas horas más tarde, ya que en el museo se te pasa el tiempo sin darte cuenta, decidimos darnos una vuelta por Hyde Park, nos comimos allí un “meal deal”, es decir, algo rapidito (sándwich, snack y bebida) que compramos en un supermercado cercano, porque teníamos aún la tarde cargadita.
Bastante cerca de allí, teníamos Leicester Square donde hoy puedes entrar en dos de las tiendas más populares de Londres, como son M&M´s World y Lego.
Después de comprar unos chocolates, seguimos hasta Covent Garden:
Y para terminar este segundo día, nos acercamos a Trafalgar Square, donde saludamos a los leones y visitamos la National Gallery, un museo de pintura gratuito.
Después de estos dos días en Londres, vinieron otros muchos más y hasta ahora que van 9 años.
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